MIS LIBROS FEMDOM

27 mayo 2019

Liderazgo femenino en la sociedad



Me estoy aficionando al programa Masters de la reforma. Como programa de reformas deja bastante que desear, pues ponen a un grupo en su mayoría de amateurs a hacer obras en plan profesional y no tienen ni unas mínimas medidas de seguridad más allá de un casco en contadas ocasiones. Y como show, lo de siempre, unos jueces divos que no enseñan nada y todo lo critican. Pero como experimento social es muy interesante. Pasa lo de siempre también en un reality show, que se pelean, por supuesto, y tal y cual. Pero a lo que voy es, que siendo un grupo de trabajo en cuadrilla con capataz, se ve cómo funcionan las jerarquías y cómo se comporta la gente con esto del liderazgo, la disciplina y varias cuestiones más.

Llevándolo al terreno femdom, obviamente me fijo en cómo actúan las mujeres, y me río cuando pienso en lo que dicen los partidarios de la supremacía femenina, que parecen vivir en otro planeta, porque en cualquier grupo social las mujeres casi automáticamente ceden el mando a los machos, aunque alguna dice claramente que no le gusta obedecer. Pero para mandones, ellos, por supuesto. Los gallitos, los que hacen cierto eso de “si quieres saber cómo es fulanito, dale un carguito”. El ego, el patriarcado, la mujercita tonta que se deja llevar por el incompetente del marido que además es un narcisista de cuidado, etc. Hay algunas mujeres con carácter, y en fin, hay muchas cosas y os invito a que las veáis vosotros mismos.

Me quiero centrar en una de las miembros del jurado, la jefa de obra. Ya con esa función, está claro que tiene que dar órdenes, jaja. Pero es interesante como ejemplo de liderazgo positivo. Mientras que los concursantes que son elegidos como capataces se dedican simplemente a pavonearse y a chulear ante los demás, dejando claro quién manda, ella muestra lo que realmente debe ser una líder. Es firme, por supuesto, y a veces exagera el papel de estricta por exigencias del guión, pero dice las cosas una sola vez, sin aspavientos, segura de su autoridad, y sin sacar el látigo ni ponerse en plan superior. Más de una debería tomar nota y dejarse de tanto teatro, aunque eso del teatro es lo que buscan muchos, así que dios los cría y ellos se juntan.

Y antes de que os dediquéis a enviar cartas de candidato a sumiso a la chica :P, la “mala” noticia es que una mujer así no tiene por qué ser dominante en su vida íntima ni gustarle los sumisos ni el femdom.

17 mayo 2019

Femdom recíproco



Al hilo del post anterior, acerca del sumiso pedigüeño, voy a comentar la otra cara de la moneda, que también existe, claro, y voy a explicar cómo la Dominación Femenina es algo recíproco, pero no de la manera que creen los y las que viven esto desde el egoísmo y el asunto financiero.

Vaya por delante que hay negocio de lo que sea porque hay demanda y oferta, así que si una tía vende bragas con la publicidad de que es algo humillante para el que lo compra, y ambos creen que eso es femdom ya solo por ese detalle, pues tan felices unos y otras. En mi opinión eso ni es femdom ni es nah, pero bueno, sigamos con el post, que a lo mejor alguno se aclara acerca de lo que consiste esto de femdom recíproco, más allá de “dame pasta y te mando bragas”.

Ya he explicado que los sumisos caraduras exigen porque es lo único que saben hacer, aparte de pagar por un servicio o hacer tal a cambio de cual (emparejados en el 90% de los casos que no tuvieron el valor ni la honradez de escoger a una mujer dominante que los complementase y ahora van lamentándose e intentando dar pena... a mí ninguna, desde luego). Por otro lado tenemos a las amitas, que abrieron cuenta en twitter, por poner un ejemplo, hace dos meses, y que piensan que chasqueando los dedos van a llover sumisos entregados hasta la médula, cuando para colmo son unas cazurras iletradas que solo saben enseñar el escote y han oído campanas y no saben donde, o tienen una situación (sip, casadas ellas también) en la que no pueden exigir un sumiso 24/7 libre como el viento que espere sentado para cuando ellas tengan un minuto libre. Tanto unos como otras se quejan de no obtener lo que quieren y lo que creen merecer, convencidísimos además, ejem.

Entonces, para mí, ¿qué significa femdom (del sano) recíproco? Obviamente todo el mundo busca reciprocidad en la vida, ya sea trabajar a cambio de un sueldo, o un aplauso gratis si cantas en público, o lo que sea. Nadie hace algo porque sí, por mucho que le excite la idea a un sumiso novato. Todos esos que van diciendo “busco Ama para hacer todo lo que me ordene y yo soy un felpudo que no tiene derecho a nada”, no lo dicen en frío. Es una fantasía calentorra y ya está. Y no es que sean falsos sumisos, que habitualmente también es el caso, sino que eso queda fuera del concepto femdom razonable y sano. Un esclavo 24/7 sin derecho ni a morirse sin pedir permiso, no existe, y a mí por supuesto que no me aporta nada un tipo que es un simple mueble más en mi casa.


Femdom recíproco significa, ni más ni menos, que cada cual ocupa su lugar y ambos se sienten realizados y compensados en esa relación. Un sumiso se siente realizado si su Ama es feliz dominándolo. Feliz, y excitable y todo lo que se nos ocurra, vaya. Que se nota a la legua cuando una finge que le gusta todo esto con una sonrisa forzada y cuándo se vuelve loca (es un decir) arrancándole la ropa al sumiso y dándole caña. Si lo único que aporta la mujer supuestamente dominante a la relación es ponerse un cartel que diga “soy Ama”, sin que sus actos lo demuestren, sin que se note que disfruta y que deja fluir naturalmente lo que lleva dentro, sin que haga nada más que teatro vacío y ponga la mano para cobrar, pues eso no es reciprocidad. Si al otro lado tenemos un sumiso que lo es de verdad, es lógico que se quede a medias y sienta que eso no le llena, y no estará siendo egoísta por decirlo, eso es realismo puro y duro.

Insisto, un sumiso que busca teatro a ratos sueltos, fantasías porno gratis, en resumen, femdom para su egoísmo, no puede encima quejarse de que solo tenga acceso a algo de segunda categoría con una aprovechada o una farsante. Es lo que hay, id a lloriquear a otra parte, que lo vuestro son lágrimas de cocodrilo.

¿Qué me atrae en un sumiso?

Aunque ya expliqué aquí lo que busco en un sumiso, voy a especificar un poco más. Lo que voy a comentar no es una guía de lo que debe hacer...