MIS LIBROS FEMDOM

27 enero 2015

Más sobre lo “normal” en el sexo


Hablaba yo en el post anterior y en este otro reciente acerca de lo estereotipado que está el sexo socialmente por lo general, y al hilo de esto ha caído en mis manos, o ante mis retinas, un artículo sobre lo que hacen los tíos en la cama y no nos gusta a ninguna mujer, porque la cosa está escrita así de contundente, por mucha etiqueta de humor que lleve.

La foto prometía, porque aunque vuelve a centrarse por enésima vez en el falo como centro de la acción, al menos es ella la que toma la iniciativa y le mete mano a él.


El artículo en sí lógicamente habla de lo “normal”, de la penetración con “preliminares” (odio esta expresión, es como decir que ir de tapas no puede equipararse o superar a una comida de dos platos y postre), incluyendo también algo tan “normal” como unos azotitos, por supuesto sobre el culo femenino... Un azote en pleno apogeo de la pasión, puede molar. Pero que uséis nuestro culo para desahogaros, pues no”. Y luego la autora del artículo dice, literalmente, que odiamos (todas nosotras, recordemos...) que nos chupen el dedo gordo del pie:

Iros con vuestros fetiches extraños a otra parte. No hay parte más asquerosa en el cuerpo humano que un pie. Por lo tanto, si a alguien le pone chuparlo, muy normal no debe ser…”


No voy a desmenuzar el párrafo porque para qué, lo único que le diría es que, en efecto, mejor que un fetichista se vaya con alguna mujer afín y se aleje de la cueva troglodita donde parece vivir esta chica. Además, ya le responde alguien entre los comentarios, echándole humor, que es lo mejor en estos casos:

...no hay nada mas sensual ke chuparle el dedo del pie mientras estas en plena faena..a no ser q sea de mordor y en lugar de un bonito e higiénico pie tenga pezuñas peludas..”

Lo de en plena faena lo dejaremos a un lado, que suena a echar horas arando al sol, pero lo de las pezuñas me ha hecho gracia.


Tal vez así no le parecería “anti-higiénico”, ¿no?...


Aunque yo tampoco veo nada malo en la siguiente escena, será que no soy "normal", y menos normal aún por no preocuparme en absoluto de no serlo :D





En fin, que vivan la “diversidad” y la amplitud de miras... 

24 enero 2015

Mi relación ideal

Quien sepa de qué va este blog, conoce más o menos por dónde van los tiros conmigo a la hora de enfocar una relación femdom. No juego, no hago sesiones, no busco una cuadra, no me atrae hacer intercambios, en definitiva, no encajo en el modelo típico de Dómina de manual y mazmorra. Lo mío es la naturalidad, la cotidianeidad, el día a día con un hombre al que valoro como persona y que además es sumiso conmigo.


Pues bien, visto así, tal vez se puede deducir que busco un novio, o una pareja vainilla con ratos bdsm. No, para nada busco eso. Ni quiero un novio-sumiso exactamente. Porque aquí entra mi concepto particular de relación, y no es la convencional hombre-mujer de parejita unida empalagosamente y separada del resto de la humanidad en su nido. Ojo, que me parece perfecto si eso le funciona a los demás, pero no está hecho para mí. ¿Quiero decir entonces que me van las relaciones abiertas? Pues no, tampoco me refiero a eso, aunque también lo respeto, faltaría más. Abierta sí, pero abierta al mundo, que un esclavo encerrado me aburriría horriblemente. Alguien que tenga sus aficiones, que no tienen que ser 100% las mías, que tenga su trabajo, sus amistades, que no tenemos por qué compartir tampoco, que tenga su entorno y una vida y unas ideas para poder hablar y comentar de todo. Si quiere ir el día D con su tía al teatro porque se lleva genial con ella no se lo voy a prohibir, otra cosa es que le dé prioridad a su tía siempre, en ese caso, que se case con ella, ejem. Eso sí, en todo momento controlando yo a dónde va y con quien, y es algo a lo que se someterá gustoso él, eso para empezar. Pero no entiendo esa cerrazón de las parejas que parecen entrar en una cárcel cuando se emparejan. “No, es que tengo que ir con él/ella porque es mi pareja”. Coño, ¿sois siameses o qué? ¿No será miedo, inseguridad, celos...?


Recuerdo a cierto sumiso que traía su plan pre-establecido de formar una familia como dios manda, tener hijos por obligación, boda de blanco y bla bla. Y aparte de que no me parecía complementario conmigo, ese fue un motivo de peso para que él me rechazase a la vez a mí. Así que hoy voy a abrirme un poco y comentaré aspectos del tipo de relación que me llena y funciona. Voy a usar unas preguntas que se supone son para que alguien se plantee si el poliamor es lo suyo, pero me parece que sirven igual para relaciones en general.
  • ¿Para ti, qué componentes tiene una relación?
Para mí una relación consiste en compartir vivencias, en tener apoyo mutuo, en saber que la otra persona te entiende, te conoce, te acepta, y que existe una compenetración a muchos niveles. Y tiene que atraerme esa persona en todos los sentidos, además de encajar su sumisión con mi dominación.
  • ¿Cuánto debe durar una relación importante?
Una relación importante no se mide en tiempo. Algunas nos marcan y son decisivas a pesar de no ser muy largas. Sin embargo, me parece importante matizar que, en circunstancias normales, sin contratiempos insalvables como la muerte, la cárcel o cosas por el estilo, si se trata de una relación importante, va a durar mucho, porque aunque dos personas estén separadas, mientras se mantenga la chispa y el sentimiento de saber que encajas a un alto nivel, aquello seguirá contra viento y marea, aunque no sea un 24/7.
  • ¿Qué es sexo?¿Es la penetración?¿Es más especifico: penetración vaginal con el pene o anal con el pene?¿Qué sucede con la estimulación y penetración manual, el sexo oral, los juguetes sexuales, el BDSM?
Aunque a estas alturas la idea más extendida sea que el sexo es coito, para mí está casi en lo último de la lista. ¿A quién se le ocurrió poner el énfasis y el peso de un encuentro sexual en un miembro que simboliza un supuesto poder y que en el mejor de los casos se mantiene unos minutos en su “puesto”? Por no hablar del distinto ritmo en las curvas de excitación de hombres y mujeres. El sexo es todo lo que ocurre entre hombre y mujer en un contexto erótico: palabras, miradas, caricias, tacto, juegos, calma y pasión, ternura y contundencia... Y por supuesto la D/s en toda su amplitud. Y si tengo que elegir, obviamente me quedo con la estimulación del clítoris, porque -atentos a la lección de sexualidad básica- el equivalente femenino del pene no es la vagina, así que, ya se puede emplear el sumiso lamiendo, tocando, o me froto contra cualquier parte de su cuerpo, eso sí que es placer ilimitado, al pene no le podemos pedir más, pobrecito.



  • ¿Qué tipos de cosas consideras íntimas? ¿El sexo, tocarse sexualmente, el contacto genital, una sesión BDSM sin una faceta sexual?
La intimidad no depende de las “cosas” enumeradas en la pregunta sino en el grado de conocimiento que haya entre ambos. Tocar a un desconocido no es una experiencia de intimidad, es solo tocar sin más. ¿Lo más íntimo? Una mirada en la que “ves más allá” de los ojos.
  • ¿Debes vivir cerca de una de tus relaciones para que sea importante?
Bueno, de la distancia ya hablé en las ciber relaciones femdom, pero la pregunta está formulada de una manera que se las trae. ¿Qué es lo que determina la importancia de una relación? Obviamente el peso que tenga en tu vida. Si vives en la misma ciudad y uno de los dos se va por temas laborales, la relación sigue siendo importante. Si creas un vínculo con alguien de otra ciudad, y se forma a pesar de la distancia, lógicamente no ha sido un obstáculo. Ahora bien... ¿puede una relación mantenerse a distancia? Poder, puede, incluso siendo algo importante, pero... el riesgo de idealización al quitar los posibles roces de verse con frecuencia existe, igual que existe el riesgo de hartazgo porque necesites a esa persona para ahora mismo, porque un abrazo no se puede dar a distancia, etc. La respuesta breve es que no es indispensable la convivencia permanente (y esta pregunta viene más abajo), pero para mí es imprescindible que haya un plan de acercamiento geográfico a medio o (no muy) largo plazo. Además, puede que el sitio esté a 10 horas en coche pero solo a una hora en avión, así que, si hay interés por parte de la otra persona, verá la forma de acortar kilómetros, incluyendo tirar de teléfono, chat, cam y lo que se tercie.
  • ¿Cómo defines fidelidad?
Esta pregunta la resuelven los infieles diciendo que son leales, lo cual se supone que es más importante que ser fiel. O sea, van de cama en cama pero siempre vuelven a la misma... porque simplemente esa cama es una inercia o comodidad o conveniencia en su vida. Vamos a ver, la fidelidad solo tiene una definición, o eres o no eres fiel. Es un ingrediente fundamental para mí: si no soy imprescindible, si soy intercambiable, no me interesa ese nivel de relación. Y lo ideal no es que se plantee como un sacrificio o renuncia, sino que surja de manera natural: solo me apetece estar contigo. Punto.
  • ¿En qué consiste la conducta amorosa, cariñosa, sexual y romántica? ¿Dónde encajan en tus definiciones cosas como el flirteo, besarse, las cartas de amor, hacerse regalos, tener citas, tener una relación, las llamadas de teléfono, los emails y la mensajería instantanea?
A ver, las “moñadas” de regalarme un ramo de flores no me derriten. Todo lo que vaya en la línea de lo que se supone hace todo macho para conquistar y tener algo a-cambio-de, me echa para atrás. Lo cual no quiere decir que no me gusten los detalles. Ojo, detalles, como símbolo de que esa persona está pendiente de ti, porque le surge así. No me van los regalos ostentosos, no me pueden “comprar” ni deslumbrarme por ese medio. Un mensaje, un regalo de algo que realmente me haga ilusión, una palabra a tiempo, todo eso es lo que me llena y me demuestra que le importo a la otra persona.
  • ¿Qué significa el compromiso para ti?¿Como defines una relación con compromiso?
Compromiso me suena a contrato, a algo impuesto. No quiero algo tan frío y maquinal, solo quiero ver en los ojos de él que necesita y elige seguir estando conmigo cada día. Si el feeling se pierde, ¿qué sentido tiene un absurdo compromiso? Mejor dejar volar a la persona, que sea feliz y que yo lo sea con alguien con quien encaje y surjan los sentimientos de manera más rodada.
  • ¿Cuáles son las cosas más importantes que necesitas en una relación?
Básicamente que me haga sentir BIEN. Y eso no significa que todo vaya viento en popa siempre, somos humanos y tenemos errores y días bajos. Pero si él pone todo el empeño y me compensa más adelante cuando falla, es todo lo bueno que puedo sacar de esa relación. Y como dije al principio, compartir vivencias y sentirme entendida y aceptada. Que seamos ambos un poquito mejores por estar juntos y que la relación nos aporte en vez de quitarnos, ese es el sentido de tener una relación en mi opinión, aunque por desgracia mucha gente quiere tener una relación como algo abstracto e impersonal por poder decir que la tienen o por miedo a la soledad, incluso cuando es más negativa que positiva.
  • ¿Cómo es para ti de importante vivir con una de tus relaciones?
Bien, llegamos a una pregunta clave. Esto entra en lo típico y parece lo deseable por la mayoría, pero soy una persona que necesita bastante espacio privado, así que la idea de una convivencia permanente me agobia, así de simple. No descarto compartir techo y sé que puedo hacerlo, pero teniendo “mis dominios privados” que el sumiso debe respetar. Por poner un ejemplo: ¿dormir juntos? Solo si me apetece. Lo cual no quita que en medio de la noche me cuele en su cama y abuse un rato de él :P O que vaya por la mañana a abrazarlo, pero ya digo, a mi ritmo.
  • Siendo realistas ¿cuánto tiempo y energía tienes para dedicarla a una relación?
Jeje, ¿cuánto tiempo y energía tengo para vivir...? Pues lo mismo. Si algo es importante en mi vida, como el hecho de vivir en sí mismo, o estar con alguien que me importa, eso te da la energía y las ganas de sacar tiempo de donde haga falta. Se puede compaginar, cuestión de priorizar y de tener ilusión.

21 enero 2015

El sumiso impaciente

Hay ciertos rasgos de la personalidad que chocan con la sumisión, y aunque forman parte de la forma de ser del sumiso, debe pulirlos si quiere seguir por la senda de la D/s. Por ejemplo, el orgullo desmedido, la desconfianza extrema, la pereza infinita, la falta absoluta de humildad, o la impaciencia, que es de la que voy a hablar hoy.


Voy a comentar un caso concreto de alguien que ni conoció mi blog, aunque ha habido muchos más en esa línea. Fueron sumisos a los que no llegué a conocer. Mejor dicho, conocí lo suficiente de ellos como para saber que no eran lo que buscaba. Porque el contacto ciber tiene sus inconvenientes pero también sus ventajas, y te ahorras lo de quedar por quedar con alguien incompatible. El sumiso que comento estaba en mi ciudad, con lo cual lo primerísimo que propuso fue quedar “y ya veríamos”. No sé muy bien qué se supone que íbamos a ver si éramos dos absolutos desconocidos con la única conexión de buscar Ama/sumiso. (NO, no es motivo suficiente, para los que no entendáis que esto es una relación como cualquier otra en la que se necesita CONEXIÓN PERSONAL). Pues bien, yo, que pongo a prueba al supuesto sumiso desde el momento en que me dice hola, lógicamente me negué en redondo. Primero por lo que comento, y segundo y principal porque no lo había propuesto YO.


Ya el hecho de que el sumiso dé los pasos, y pretenda quedar, o dé el teléfono sin pedírselo, o el skype o el facebook o lo que le salga a él de las narices, es una señal de que quiere mandar él y hacer las cosas a su manera. También es que vienen “contaminados” del mundo vainilla y es lo normal en esos casos, pero si encima presumen de experiencia con Amas, la cosa no tiene pase. (O “amas” que no les enseñaron ni lo básico).


Así que le dije que con desconocidos no tomo ni un vaso de agua, y sin ver una foto menos aún. Esto de las fotos da para un largo post, que no voy a molestarme en escribir, así que lo resumo. Yo entiendo que tiene sus riesgos enviar fotos por el ciber espacio, pero casi siempre es una excusa cuando no te da la real gana. Ese individuo me dijo, como tantos otros, que no sabía si le estaría enviando la foto a un pajillero... Vamos a ver, no dudo que haya locos y aburridos que se hagan pasar por una mujer. Ya lo de hacerse pasar por Ama es más difícil, a no ser que parodien a la típica amita de manual, soltando en cada frase “obedéceme, gusano, o te escupo” y cosas así. Tampoco entiendo qué peligro tiene mandar una foto VESTIDO a un pajillero o a quien sea. ¿Creen que le va a poner una marca de agua que diga “pervertido” y publicarla a lo ancho de todo internet? También entiendo que no enseñen foto en el primer correo, pero si no lo hacen ni en el enésimo, es una desconfianza que da asco, y no recompensa el tiempo que perdemos con ellos. Cualquiera diría que el pollo era como el de la foto, ya que hablamos de impaciencias e ímpetus...


En fin, sea como sea, al sumiso no le da la gana de enviar foto, y punto. O te manda una falsa, y si le dices que el tío se parece a un actor o modelo, te reconoce (al cabo de años, caso real) que en efecto no era él, pero que no seas tan tiquismiquis de molestarte por eso. Es curioso lo de estos que son pillados en una mentira, encima ni pestañean y somos nosotras las raritas por molestarnos por su falsedad. Ains, qué pena cómo les va el cerebro a algunos.


Total, que con el “sumiso sin cara” empecé a cambiar unos pocos correos a ver qué supuesta conexión había ahí. Y claro, lo mismo que no quería dar su foto, soltaba información con cuentagotas. “Trabajo en *cosas*” (literal, eh), “busco Ama” (wow, no especifiques tanto), “tengo una edad como para saber de qué va esto”, etc.


Dediqué mi preciado tiempo a explicarle mi visión del tema, en hacer alguna broma, en mostrarme en resumen tal como soy, y le pregunté cosas básicas sobre su hipotética sumisión. ¿Y cómo responde él? Pues para empezar dice “uy, cuántas cosas me escribes, a ver si soy capaz de responderlas todas”... Sí, anda, no te vayas a herniar, chavalote, no quiero ni imaginar lo que sería el día a día contigo, seguro que tengo que pedirte de rodillas y por favor las cosas yo a ti. A continuación me responde en plan telegrama a lo que le comento, y para rematar, me dice de manera textual “espero impacientemente tu respuesta”. Jajaja, ¿impaciente, tú? ¡Que va! No lo he notado, ejem, ains.


Bueno, pues le dije punto por punto lo que me molestaba hasta el momento, y que no veía ni un gramo de actitud hipotéticamente sumisa por su parte. Solo veía a un tipo vainilla intentando quedar a toda costa con alguna que le haga tal o cual práctica bdsm. Porque además me contó que sus experiencias sumisiles consistían en haber quedado en su piso con unas tías “que no le ofrecían lo que le interesaba a él”. Cuando le dije lo de no parecer sumiso, cambió el tú por el Usted, jajajaja. Le aconsejé que se olvidase de ese truco, que conmigo no colaba ni por asomo, yo distingo el respeto en el Tú y la falta de ídem en el Usted.


Le envié un último mensaje de “adiós y suerte” y él, en su línea habitual de resbalamiento ante cualquier cosa que le dijese, me respondió que había perdido la cuenta de los muchos mensajes que tuvo que intercambiar conmigo, que se negaba a interminables correos que no llevaban a nada, y que si me interesaba ya sabía dónde estaba y lo que podía hacer (quedar sí o sí, aclaro).


Si presionas, si no aceptas el ritmo de ella, si tu cabezonería te impide ver más allá de tu ombligo, si la haces sentir molesta e incómoda con tu actitud de todo-o-nada, tú no eres un sumiso, eres un morboso egoísta disfrazado de lo que no es, y ya que mencionas tanto al pajillero, será porque tú eres uno de ellos. Pero para eso estamos nosotras, para separar la paja del grano.


No os podéis imaginar la satisfacción -y comodidad- que supone calar al caradura de turno sin moverse de la silla. Un gustazo cósmico. Para cosas así, impagable internet...

18 enero 2015

Mirándome el ombligo y mi canal youtube

No es que esté aburrida o me sobre el tiempo precisamente, pero el otro día hice un experimento y puse el título del blog en google. En muchos links no me atreví a pinchar, tenían pinta de spammers, pero me hizo ilusión comprobar el eco que esto puede tener.

Una cosa que me hizo mucha gracia fue ver algunos vídeos que traigo por aquí en webs de vídeos porno femdom. No sé yo si se va a calentar mucho el usuario típico de esos sitios, lo siento (bueno, en realidad no) :D


Y hablando de vídeos, aprovecho para comentaros que hace tiempo tengo canal en youtube.


Como ya dije aquí, hice un vídeo-anuncio sobre mi novela femdom. Luego pensé que podía aprovechar ese canal de youtube para algo más, así que llevo un tiempo subiendo los vídeos que pongo por aquí, pero no he dicho nada porque de momento están en “fase de prueba”, sobre todo frente a la censura y los conflictos con el copyright, como si poner fragmentos no fuese hacer publicidad gratis. A pesar de no avisar algunos me habéis “pillado”, y ya tengo más de 30 suscriptores :P

Algunos vídeos han sido bloqueados, pero en fin, espero subir, si no todo lo que hay en el blog, al menos la mayoría. Puede ser práctico tenerlos todos reunidos ahí, y de paso hago declaración de intenciones y campaña del tipo de femdom que intento transmitir:

Vídeos de femdom entresacados de historias convencionales y alejados de estereotipos, con clase, humor, erotismo y sensibilidad.

Si tu concepto del tema coincide con el mío, estás invitad@ a suscribirte, visitar los vídeos allí y/o darle a Me gusta para aumentar la visibilidad del canal ;)

Edito: ese canal me lo borraron por censura, así que en el lateral del blog tienes todos los links actualizados.

12 enero 2015

Lo intenté


Siempre ando dando consejos y este me lo dedico a mí misma. He dudado un poco acerca de publicarlo o no. Vaya por delante que no lo hago por desquitarme o algo parecido. A veces he dejado caer que algo ha habido en mi vida en estos años de blog y que me sentiría como una boba si siguiera aquí con las manos vacías a estas alturas. No voy a entrar en detalles ni mucho menos, si alguien bucea en la etiqueta Cosas mías verá retazos de experiencia real que fueron inspirados por alguien en concreto. Hubo un par de historias más, pero no duraron tanto. Y bueno, tras muchos meses el resumen es que la historia no es que haya que luchar por mantenerla a flote, sino que hay que achicar a toda velocidad porque no para de entrar agua. Sin malos rollos, pero con una barrera invisible con la que choco una y otra vez.


Tengo que confesar que llevo luchando contra esa barrera desde el principio, sabía que no era una situación sencilla ni una persona abierta en sus sentimientos, pero a pesar de todo no lo descarté ante la primera “espantada” que dio, no me rindo fácilmente. Soy comprensiva, empática, paciente. No con cualquiera. Casi con nadie, añadiría, y ya sabéis cómo voy calando a cada farsante que me llega, por eso, cuando me vuelco, me vuelco. Y eso hice. O eso creo. Y le di tiempo. Y espacio. Y desaparecí para que se aclarase y regresé a ver qué tal. Pero la barrera sigue ahí, nunca cayó de hecho. Sé que es mucho resumir, pero básicamente es el principal escollo para mí, ese muro infranqueable de alguien que no puede abrirse como necesito o que no quiere o que... yo qué sé, a estas alturas poco importa el motivo. Alguien no está “ahí”, en el punto X, y es lo único que te queda claro. Como claro me queda que no es mi ideal de compañero en la vida una ostra cerrada, y tampoco me gusta hablar en estos términos, pero es para que se me entienda.


He dicho que me vuelco, que es la forma de “entregarnos” que tenemos la parte dominante, porque en todo en esta vida hay que dar para recibir, esto no es una excepción. Me refiero, claro, cuando el sumiso interesa, de lo contrario no le des ni la hora. Tienes que crear un entorno de confianza, tienes que transmitirle que puede abrirse a ti sin temor a salir herido, es mucho lo que va a entregar (a sí mismo) y es normal que no se lance a lo loco, y el primer paso para crear el entorno seguro lo tenemos que dar nosotras. Luego tiene que haber apertura mutua, y si él se cierra en banda, tenemos un problema. Que no te vea como alguien a quien confesar sus problemas, preocupaciones, etc -sin tomarnos por un paño de lágrimas- no es buen augurio.


Pero no me quiero desviar ni dejar correr ríos de tinta. Escribo este post porque me parece importante dejar constancia de que esto puede funcionar (usar internet para encontrar parte complementaria) y para animar a todas esas mujeres quemadas en la búsqueda, porque tengo algo positivo (creo) que aportar a vuestro momento de desesperación y manos vacías.


Hablar de intentos fallidos no es agradable. Además, ¿fallidos en qué sentido? ¿Porque no hubo final “feliz”? ¿Acaso tenemos que llegar siempre a un punto cuando salimos de otro y no sabemos ni a dónde vamos ni planeamos siquiera el viaje? Casi siempre es más importante el trayecto que el destino, y un finde de cámping puede pesar más en tu vida que un mes de crucero.



Un fracasado es alguien que no convierte su fracaso en experiencia”. Este es uno de mis lemas en la vida, de todo intento sacar conclusiones positivas, incluso de lo malo sacas lo que no quieres repetir. En la vida no sabes lo que te encontrarás al final de cada curva (sip, la foto es real), así que al menos lleva el plan de ruta de intentarlo cada vez, “querer es poder” es otro de mis lemas.


Por si alguien se está preguntando cómo funciona esto de que ocurra el milagro de que la super exigente Ama S. de una oportunidad, lo comento a continuación. ¿Qué pasa cuando conozco a alguien que parece compatible como persona y que tiene la misma tendencia (D/s) que yo? Pues realmente no planeo que pase nada, en todos los casos a los que me refiero no empezamos a hablar en términos de Ama/sumiso desde el “hola”, simplemente acaba pasando algo porque es bastante inevitable. Estás a gusto, notas que te entienden, sientes que tú empiezas a dominar la situación y él empieza a someterse a que todo vaya a tu ritmo y manera, y de forma rodada pasas a otro nivel y a otro. Luego a lo mejor te das cuenta de que no era tan así la cosa, y de que aquello que no cuajó ya venía torcido desde el comienzo. Y no pasa nada, oye, a quien no se le nubla el entendimiento es que cayó de una nube de los dioses, a cualquiera le puede pasar. Lo importante es el aprendizaje y la vivencia, y como digo en el título, la certeza de que lo intentaste. Y un día te paras, piensas en que lo único que tienes es más bien una nube flotante, él encima lo confirma, deja claro que si alguna vez dijo algo de luchar ya la palabra no aparece por ninguna parte, y la cosa se deja estar quieta una temporada o para siempre antes de que llegue a una hecatombe mayor.


Pero voy al mensaje positivo que quiero transmitir con esto. Si pusiese fin a este blog mañana o dentro de X tiempo, sin resultado positivo en mi búsqueda, podría poner con toda la tranquilidad de mi conciencia ese epitafio digital: “lo intenté”. Porque sí, señor@s, yo puedo decir que lo intento, que por energía de mi parte no quedará, y que cuando me dicen eso mismo de “vamos a intentarlo”, yo pongo de mi lado, mucho, demasiado a veces, más allá de lo razonable en ocasiones. Y cuando veo que al otro extremo de esa supuesta cuerda conectora hay una especie de globo que se va desinflando por mucho que sople, porque hay un agujero que no vi desde el primer momento, ya aplico lo de “no esperar lo imposible ni retrasar lo inevitable” (tercero de mis lemas). Y aquí lo más desconcertante es cuando veo que por la otra parte hay una actitud de ni me voy ni me quedo, no voy más allá pero sigo con la lluvia de tejos. Ahí es cuando me tengo que plantar porque me gustan las cosas claras y no creo merecer medias tintas.


No quiero sonar como esas mujeres que exclaman incrédulas “pero si lo di todo, y él no me correspondió”. No, no hay que tener expectativas ni culpar a alguien por no estar en el punto que tú quieres, ni culparte a ti, siempre hay dos culpables, o ninguno, y es en todo caso culpa tuya por insistir en sacar de donde es complicado hacerlo si ya estabas viéndolo venir desde el momento en que tú lo empujaste la primera vez a salir de su esfera de confort. Confort no significa estar genial, es solo esa zona conocida y cómoda, eso de preferir lo malo conocido antes que lo bueno por conocer.


Lo dicho, lo intenté. Lo seguiré intentando. Eso es vivir. Lo de los muertos vivientes debería quedarse para las películas gore. Espero que resuciten todos esos zombis. No es un insulto ni un reproche, en serio lo espero, y que sea pronto, por su bien y por el de las mujeres como yo que no vemos esos agujeros por los que se les escurre la vida sin que tampoco ellos se den cuenta. Hoy estoy triste, y no es por mí.


Lo intenté... debería ser el epitafio de todos los mortales, ¿no os parece?


(Gracias por hacerme ir a “lugares” que pensé que solo volvería a pisar en sueños. Ojalá saques beneficio de mis palabras algún día, lograr dejarte esa huella me llenaría de satisfacción aunque no fuese yo el espejo de tu dicha, te mereces ser feliz por mucho que no lo creas).

10 enero 2015

Consejo para chica mexicana


No sabía qué título ponerle al post: chica desilusionada, chica desesperanzada, etc, pero creo que lo mejor es ser positiva y dejarlo así, que tal vez sea más favorable para ayudarla en su búsqueda de sumiso. Su mensaje es este:


Buen día, Ama S
He seguido tu blog desde hace dos años, me encantan tus entradas y el humor con que las escribes, coincido en muchas cosas y me declaro fan de tu blog.

Primero, me presento: soy mexicana, de naturaleza dominante, empecé a practicar bdsm hace unos 7 años... o sea, no estoy tan perdida jajajajajaja

Segundo, quiero agradecerte por la labor que haces al llevar el blog actualizado y seguir publicando cada semana, sé que es una ardua tarea, yo misma empecé a escribir y a gritar mi opinión por este medio, quise abrir un blog y ahí fue cuando me di cuenta de que es toda una faena!!... Por lo mismo, agradezco tu trabajo y dedicación, a parte de que traes luz a personas que coincidimos en la forma de ver la Dominación Femenina y nos ayudas a ubicarnos un poco... que de por sí ya es complicado diferenciar a un fetichista de un sumiso y separar BDSM de la DF.


Tercero, el motivo de que escriba es porque me gustaría saber tu opinión...

Es obvio que estoy totalmente a favor de la Dominación Femenina, simplemente porque ese es mi equilibrio, así funciono bien. Tengo claro que para que funcionen mis relaciones erótico sentimentales debo ser yo el centro de la misma, la voz cantante y que la otra persona tiene que ceder primero y esforzarse.. de lo contrario me convierto en un ser quejumbroso y frustrado (lo cual no le hace bien a nadie, menos a la persona de en frente)... simplemente, no funciono. Esto es complicado en una sociedad machista como la mexicana, cuando a los caballeros los mismos congéneres los tratan de "maricones" y pobres de aquellos que se sometan a su pareja ( esos "mandilones" que me encantan) porque las burlas no pueden faltar. Por lo mismo, me decanté hacia el BDSM para buscar hombres que (se supone) tienen claro y aceptan que quieren someterse con gusto y placer a una mujer, a parte de mi gusto por prácticas un poco sádicas y el pegging (que creo que puedo prescindir de ellas, siempre y cuando tenga una relación con un hombre de naturaleza sumisa)


Yo sé que me comprenderás, después de pasar por casi 3 años de desilusiones buscando entre fetichistas, falsos sumisos y mentirosos (maldito el último, que fue el peor!!!)... me he preguntado ¿qué demonios hago yo en el BDSM? si yo quiero una persona que esté de acuerdo conmigo para hacer un buen equipo y formar una familia... Es claro y obvio que una no va a encontrar al caballero intelectual, con principios y responsable (quien quiere a su mujer tanto como a si mismo, o quizá un poquitín más jajajajajaja) en un lugar en el que el principal objetivo es conseguir una experiencia sexual...

So... mi pregunta: ¿has buscado otros medios a parte del BDSM y sumisos para encontrar a esa persona que se acople a ti? ¿Has tenido suerte?...

También esta desesperanza me lleva a pensar otras cosas y jerarquizar otras tantas más...

¿Cómo mantener la paciencia y la esperanza de que "en una de esas" te puedas topar con aquel hombre?...


¿Cómo sobrevivir a tanta desilusión y no darse por vencida?...

(Me releo y parece que soy una chica más que está buscando al príncipe azul... jajajajajaajaja)

En lo particular, hay días que me gana la negatividad y pienso que ya no hay nadie con quien pueda volver a encajar ( ya lo hubo, estábamos hechos a la medida y se me murió)... quizá sea una estupidez pensar de esta forma, pero si sólo tenemos una oportunidad de esas en la vida, pues estoy muy jodida xq la mía ya fue... jajajajajajaja

Quizá solo deba dejar de pensar en ello mientras mi corazón sana... ¡ah, porque ese es otro tema que me encantaría platicar contigo! ... ¿cómo lograr mezclar el corazón con la D/s preservando ambas naturalezas?... q yo sé que no tienen por qué contrapuntearse... pero este corazón de pollo tiene muchas fallas ... como dije, creo q otro día q no esté tan sentimental pueda tratar el tema con más coherencia y raciocinio.

Me encantaría tu opinión y un consejo...


Antes que nada, en casos así me siento halagada y a la vez abrumada, porque en serio que no creo tener todas las respuestas; si a estas alturas no he podido gritar a los cuatro vientos que tengo a mi sumiso ideal tal vez yo tenga algo que ver, y mis métodos no sean los correctos para pasar de cierto punto cuando surge alguien con quien parece haber conexión y buena sintonía D/s, que haberlos los ha habido en estos años gracias al blog. Ahora es cuando desde sus rincones saltan todos ellos diciendo, nooo, no tienes culpa, somos nosotros, tranquila... lo que pasa es que son tímidos y no se atreven a hablar en público XD


Ah y gracias por tu fidelidad y por ser fan. Hace poco me escribía una pareja diciendo que llevaban mucho tiempo siguiéndome y dándome las gracias por el blog, y esas cosas animan, que una no es de piedra. Además coincide con un momento en que a punto estoy de tirar la toalla con respecto a los sumisos, así que si al menos estoy haciendo “labor social” eso me lo tiene que devolver el destino, vamos, digo yo :D


Bueno, vamos a ver, entrando en materia, te doy toda la razón acerca de la contradicción de buscar a alguien compatible entre los que únicamente buscan sexo o morbo o un rato de relax fuera de su vida vainilla. Puede parecer que la solución es buscar entre los hombres “normales”, pero... yo llevo toda la vida entre esos hombres (están por todos lados, claro, jaja) y no me puede llenar alguien que no sea sumiso, así que lo tengo jodido. Otros medios he probado, sí, foros, chats, anuncios, y también he buscado fuera de entornos bdsm, donde de hecho hay hombres que dicen ser sumisos pero creo que confunden la palabra con dios sabe qué, porque nada que ver. Debo decir que hay algo que no he probado y no está en mis planes: las quedadas de comunidades o grupos bdsm. Esto es largo de explicar, pero el caso es que no me sentiría cómoda, aunque me consta que les sirve a otr@s y desde luego de golpe te llevas la impresión que sea con el sumiso en cuestión. Yo busco un hombre sumiso en un entorno habitual, no tenerme que esconder en un rincón oscuro, pero será un medio tan válido como otro.


Lo del destino y uno para cada una, no sé yo, hay miles de millones de habitantes en este planeta, sería mucha casualidad que lo encontrases justamente a él por esa regla de tres. Con tu edad no deberías sentirte tan desesperada, yo a los veintipocos no sabía ni que hubiese sumisos sobre la Tierra.

Ya comenté Cómo encontrar sumiso en un post anterior y el resumen es que lo ideal es empezar por la vida real, sacando el radar y si es que el sumiso no se esconde como suele ser habitual, pero si estás en una sociedad híper machista o no eres de mucho socializar, no te queda otro remedio que acudir a la Red. Internet tiene sus riesgos, como la vida misma, pero desde luego permite ampliar el abanico, para bien y para mal. Los trolls e impresentables se multiplican, y también la gente interesante. Luego quedará el problema de la distancia, pero mientras se cuaja algo en firme es preferible pasar una semana al año con ese sumiso especial que un año con un cretino.

Lo que comentas de jerarquizar es una duda razonable, no se puede tener todo ni existe el sumiso perfecto, lo importante como dices también es formar equipo, y si alguien no se siente atraído por prácticas concretas siempre se puede explorar eso en el futuro. Lo fundamental es cómo te haga sentir él, a nivel persona y como dominante.

Entonces, ¿tu pregunta era...? :) No, a ver, te entiendo a la perfección, pero yo me quedaría con la idea de que si hemos tenido la suerte de encontrar a un buen sumiso/persona en el pasado, no sería suerte sino que lo merecíamos, así que no es imposible que ocurra otra vez. Tal vez ahora estamos arrojando un mal karma, y sin embargo en esa época no sabíamos lo mal que estaba el tema y por eso estábamos más positivas y el universo nos hizo el regalo. Podría ser, ¿no? ;)

Me preguntas cómo no perder la esperanza y tal. Pues opino que la esperanza no se pierde... no perdiéndola :) Tenemos una tendencia minoritaria, algo que está en una parcelita dentro de la D/s en la que abunda el caso inverso Amo-sumisa -incluso me da a mí que el movimiento bdsm-gay está bastante más consolidado-, y también somos la minoría dentro del bdsm de sesiones sin implicación afectivo-emocional, por lo que el tema se complica hasta el infinito. No es casualidad que tantas mujeres en todo el planeta se quejen de la misma dificultad, es que sumisos puros, que se sientan realizados entregando antes que recibiendo, existen uno entre un millón de los que dicen serlo. Vamos a tener que hacer un pacto y la primera que encuentre a un diamante de estos que lo vaya rotando entre las demás, y si protesta, se le pone una mordaza :D


Sobre la otra cuestión, de compatibilizar corazón y D/s, yo no le veo mayor problema. Nos podemos preguntar, ¿cómo combinamos D/s con nuestro trabajo, con nuestra familia, con el resto de nuestra vida, con nuestra humanidad llena de virtudes y defectos? No somos máquinas, no podemos separar las cosas ni apretar botones que apaguen-enciendan partes de nuestro ser. Todo lo que pase en clave D/s lo experimentan dos personas con días buenos y malos, con sombras y luces. A veces parece que tenemos que dar la talla, sobre todo nosotras, como mujeres todopoderosas y perfectas, y yo reivindico que estamos en nuestro derecho a necesitar un abrazo, a mostrar nuestra fragilidad, y a que no nos bajen ni un milímetro de nuestro pedestal imaginario por eso, sino por el contrario que valoren que seamos de carne y hueso, que para diosas de cristal inmutables ya están las estrellas irreales del porno.



Bueno, pues no sé si te habré ayudado en algo, creo que no he descubierto la piedra filosofal precisamente, pero para que te sea de verdad útil mi respuesta, si algún sumiso mexicano lee esto y me contacta interesándose por ti, prometo que te lo envío envuelto con un lazo :) Suelo tener bastantes visitas desde tu país, es el tercero con mayor nº de visitantes tras España y Argentina, en el mapa puedes ver las recientes de las últimas horas; tal vez alguno esté en la línea de lo que buscas. De todos modos, para no convertir el blog en una agencia matrimonial D/s, invito a participar por aquí a quien esté buscando Am@ o sumis@, a ver si alguien os echa el ojo. Y digo participar, no vale eso de “soy sumiso y busco Ama”, que las webs de contactos ya existen.


Un abrazo y ánimo.

06 enero 2015

Orígenes femdom

No recuerdo en mi infancia referentes atractivos acerca de chicas dominando y chicos sometiéndose de manera evidente, ya sea en la pantalla o en cuentos/libros, más allá del príncipe fetichista de pies que todos conocemos y de la madrastra malvada, y con esta última no podía identificarme por aquello de sus instintos asesinos, aparte de que en esas edades no puedes meterte en la piel de alguien tan alejado de tu momento vital. Así que no hay nada en mis recuerdos excepto por estas dos escenas, que no es mucho pero que a mí me impactaron una barbaridad. “Como desees”... habré visto esa escena cien veces y se me sigue poniendo la misma sonrisa siempre, y en cuanto a la otra, eso de “no tienes poder sobre mí” fue como abrirme los ojos de par en par y exclamar, “¡esa, esa es la actitud que necesito ver en una chica!”.


Hoy en día el tema no ha evolucionado demasiado desde el cuento del príncipe azul que salva a la pobre chica que al parecer no es capaz ni de ponerse sus propios zapatos, y ya está bien de hacer creer a todo el género femenino que esa clase de príncipe azul existe; yo en todo caso creo que un sumiso -mi modelo de sumiso al menos- es lo más parecido que hay a eso, y por lo demás, la única manera de que un hombre se vuelva azul es hacerle un bondage... en el cuello.



Así y todo se van viendo algunos cambios en ese modelo tan trasnochado y falso, y parece que se empiezan a poner las pilas un poco a la hora de presentarnos modelos femeninos en pequeñito. Con escenas como las que traigo sí que se puede identificar alguna futura Ama. A mí al menos me tocan la fibra. Y para quien se sorprenda de que yo vea esta clase de películas, pues sí, las veo y las disfruto; cuando son buenas no me importa el género, a pesar de que en el manual de la perfecta Ama de cartón-piedra no quepan ciertas aficiones...







03 enero 2015

Femdom a distancia


Ya comenté lo que opino de las ciber relaciones hace un tiempo. Pero el ver esta película me ha hecho reflexionar de nuevo sobre el tema. Antes, un inciso para que veáis cómo suele estar el mapa de visitantes a este blog:



Es como si hubiese una línea imaginaria de Andalucía para arriba y ahí se concentrasen todos los posibles sumisos, y las Amas también, claro. Así que si esto sirve como algo representativo y vives en el centro-norte, debería alegrarte saber que tu posible mitad femdomera no anda muy lejos. En mi caso, lo poco o mucho que he vivido con algún sumiso desde que tengo blog, ha sido la mayor parte a distancia, con todo lo que ello conlleva, que no todo son desventajas.


La principal ventaja, y por ahí andan los tiros en la película que comento, es poner a prueba la relación. Si alguien supera su comodidad y su inercia para mantener la llama, te está demostrando que lo suyo no es flor de un día. Por otro lado tenemos la obvia desventaja de sentir que estás con un holograma de esa persona, y que solo ves la versión filtrada de él/ella. Porque internet y el teléfono pueden ser buenas herramientas con muchas posibilidades para mantener la chispa, pero si en vez de un medio se convierten en un fin, aquello se estanca y se muere por frialdad y hastío, porque cuando ves que alguien te dedica las migajas de su tiempo es el momento de buscar a otr@ que te de auténtica prioridad.


Todo eso ocurre en la película esta, 10.000 km, pero la traigo también por los momentos que vais a ver. Me da a mí que si el chico hubiese sido sumiso habría recorrido el globo entero con tal de no perder a esa mujer. Por mi parte, mientras ocurre el milagro de que la línea imaginaria del mapa descienda hasta el estrecho de Gibraltar, tengo el firme propósito para este año de no dejarme engañar por espejismos cibernéticos. Quien quiera ir más allá conmigo tendrá que ponerme en la primera página de su agenda y dejarse de escondites virtuales.

Os deseo buen año, por cierto.


¿Qué me atrae en un sumiso?

Aunque ya expliqué aquí lo que busco en un sumiso, voy a especificar un poco más. Lo que voy a comentar no es una guía de lo que debe hacer...