Un esclavo en el ático

Ya sé que últimamente estoy publicando vídeos muy seguido, y no es porque no tenga más cosas que comentar acerca de femdom, sino porque hay imágenes que valen más que mil palabras. Esta película, -sugerencia de un comentarista peculiar (larga historia...)...- resulta bastante interesante para reflexionar sobre diversos temas, aparte de lo inédito de toparse con momentos tan claros de relación D/s, con bondage y besos de pies incluidos. El título es Un hombre en el ático, pero lo he adaptado así porque lo de esclavo sexual aparece literalmente en una escena cuando hay cierto titular en los periódicos. Vaya con lo que tenía guardado en su filmografía el presentador de los Oscars de este año.

El argumento es que una mujer casada por conveniencia (típico del siglo pasado) se enamora de un jovencito al que acaba metiendo a vivir en su buhardilla para tenerlo escondido del marido y siempre a mano para poder usarlo, tal cual suena. Hay un momento con un doble sentido femdom que supongo no sería intencionado, cuando él dice que ella ha moldeado una escultura con sus propias manos, y que por eso es maravillosa; es como si le dijera: “aquí estoy para que me moldee a su gusto”, y es algo que se puede hacer por la edad e inexperiencia de él. Para empezar lo inicia en las artes amatorias, y también le encarga las tareas domésticas y lo tiene en régimen de 24/7. Y bien, la situación, que puede tener su punto de morbo, lleva a la reflexión sobre las consecuencias de algo así, más allá de que todo ocurra por ocultar un adulterio. Él apenas sale, ni ganas que tiene de alejarse de ella por un minuto, y renuncia a todo por esa mujer. Yo desde luego no querría eso, como ya he comentado más de una vez. El sumiso se volvería una simple maceta y acabaría más loco que cuerdo. Ella pierde con el tiempo interés en él y busca otros hombres para pasar el rato, como en la escena en que dice que le gusta llevar el mando y el otro dice que con él nanay, porque claro, no podía faltar la idea de que ella necesita un hombre de “verdad”, y la pareja Ama-sumiso está al borde de la ruptura varias veces.

Sin embargo en esta película todo sale bastante bien y él no se arrepiente de nada. Como dice al final, todo lo hizo por ella, lo volvería a hacer, y fue todo por amor... y por sumisión, añadiría yo, porque vamos, más claro el agua.