Por si no lo he dicho ya, el sumiso que busco yo es un hombre “normal” (normal = persona sin problemas de autoestima, soledad, complejos, trastornos mentales, en resumen, que no se refugie en la sumisión por una carencia o por querer experimentar un vicio inconfesable) que se siente realizado cuando se entrega a una mujer, por resumirlo mucho. Si el Ama está por encima del sumiso, no es porque él esté por debajo, en el sentido de estar degradado y humillado hasta extremos patológicos. A partir de este punto, se podrían considerar como dos vertientes en la Dominación Femenina Una, la más extendida, al menos en el porno y en todos los clichés, es la del sumiso-gusano arrastrado que solo busca humillación y sentirse como una basura. La otra, que creo (y espero) va en aumento, es la de considerar al sumiso como un igual que se arrodilla para dejar a su Ama en un lugar más elevado, y que precisamente por ser valioso como persona y hombre, le da a su entrega una dimensión realmente meritoria. Yo personalmente necesito admirar al sumiso, así como suena, no me van los trapo-sumisos sin autoestima.
En esto opino parecido al tema de la supremacía femenina. Si se demostrase científicamente, -o a golpe de dictadura mundial como fantasean los más fanáticos del tema-, que las mujeres somos superiores al hombre, tendríamos una Dominación Femenina “por cojones”, y en vez de hombres entregados desde su libertad tendríamos a una raza inferior que no tiene elección, libertad ni alternativa para someterse, y esto, francamente, me parecería algo tan poco atrayente y excitante como ir a echarle pipas a las palomas. Supongo que en esa situación, para tener una relación mínimamente satisfactoria con alguien, tendríamos que liarnos entre nosotras, algo que aparece también mucho entre las fantasías de esas mentes masculinas sedientas del yugo de la esclavitud extrema.
La humillación sexual es una cosa, e ir a la yugular de la persona que hay tras el sumiso, otra muy distinta, y hay que tener muy claro donde acaba una y empieza la otra. Ser una Ama insensible y sin escrúpulos no te va a elevar a los ojos de un sumiso sensato, ni a los de los otros cuando se les pase el calentón. Mostrar tu humanidad solo hará que aumente su admiración por ti, y quien te vea “menos Ama” por eso, que vaya aflojando la cartera, que por ahí venden ultra sadismo por el precio que quieran pagar.
Un sumiso que lo sea más allá del calentón de un momento, también necesita admirar a su Ama como persona. Toda la gama de sentimientos positivos entre ambos, admiración, respeto, complicidad, afecto, etc es lo que, para mí, le da la base sana a una relación de aparente desequilibrio vista desde fuera.
En algunas relaciones de Dominación Femenina, por lo que parece, lo único que hay es odio y desprecio hacia el sumiso, y aunque sea consentido, no deja de ser una base propicia para todo tipo de abusos. Leí el otro día que a veces las personas se sienten igual de enganchadas por un vínculo positivo que por uno negativo, y en esas historias me da la impresión de que ocurre esto del vínculo malsano.
Con lo intenso y valioso que es todo cuando la otra persona te importa... Coincidiendo con el día internacional del amor por narices, aprovecho para decir que el amor (pero no ese que nos venden desde los medios, sino en toda la extensión de la palabra) le da otra dimensión a todo. Cuanto más profundo el amor, más fuerte es la emoción, como cantan ellos. Y me quedo con esta frase de la letra, porque eso es lo que supone un buen sumiso en mi vida:
Significas un mundo para mí
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu comentario aparecerá publicado si supera la supervisión de contenido permitido